Con la edición 2025, la Marcha Cicloturista de Mequinenza alcanzaba su mayoría de edad convirtiéndose en un ejemplo de supervivencia. Una prueba única, no competitiva, que se mantiene año tras año en el calendario ciclista y que con dada nueva edición suma caras nuevas. La prueba está organizada por el Club Ciclista Mequinenza, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Mequinenza, la Comarca del Bajo Cinca y la Diputación de Zaragoza y del patrocinio de la planta de Mequinenza de Procter&Gamble y de Distribuciones Murillo.
Un total de 50 ciclistas con edades comprendidas entre los 16 y los 72 años han tomado parte en esta cita deportiva, que se ha desarrollado sin incidentes remarcables y con una temperatura que apenas ha superado los 30 grados en la recta final. Buena parte de los inscritos se han atrevido con la Subida al Castillo, una ascensión de 1,5 kilómetros y rampas de hasta el 14 % de desnivel, tras completar los 112 kilómetros de recorrido que permite a los ciclistas que lo deseen medirse y poner la guinda a su participación en la prueba.
Durante el trayecto los participantes han estado acompañados por Protección Civil Bajo Cinca, Guardia Civil de Tráfico, Policía Local de Fraga, asistencias sanitarias, voluntarios y organizadores, que han velado por la seguridad de los mismos. Además han disfrutados de dos avituallamientos, uno menos que en ediciones anteriores, en Ontiñena, ofrecido por el Ayuntamiento, y en Zaidín, gracias a la colaboración del Club Ciclista de la localidad.
Marcos Soler, del Club Ciclista Mequinenza que compite por la Escuela Ciclista Zaragoza Ecotisa-Eventos Vinilo y que recientemente se ha proclamado campeón de Aragón Sub23 de XCM, coronaba la Subida al Castillo en primera posición por segundo año consecutivo reviviendo el duelo que protagonizaron el año pasado con el montisonense Javier Blanc, del Club Ciclista Oscense, que fue segundo. La tercera plaza en categoría masculina ha sido para Jorge Ralfas, del Erjarom Bikes.
En categoría femenina han sido cuatro las ciclistas que se han atrevido a afrontar el reto final que propone la Marcha Cicloturista de Mequinenza. María Cabré, del Club Ciclista Baix Ter, ha sido la primera en coronar la dura ascensión seguida de Lidia Castro, del Biking Point, Sara Pueyo, del SC Victoriana, y Raquel Gil, del Épila Corre. En la categoría local Marcos Soler se ha subido a lo más alto de un podio que han completado Xavi Aguilar y Sergio Lizana.
Antes de la ceremonia de entrega de trofeos se rindió un homenaje a la Asociación de Amas de Casa “La Torrentina” de Torrente de Cinca, que ha colaborado con el avituallamiento situado en el municipio vecino y que este año se ha eliminado por motivos de logísticos con el objetivo de reducir la duración de la prueba y evitar los horas más calurosas del día de cara a afrontar el último esfuerzo, la Subida al Castillo, en las mejores condiciones posibles.
Además de los galardones a los primeros clasificados de las diferentes categorías se procedió a la entrega de los reconocimientos al club más lejano y al más numeroso que recayó en el Club Ciclista Ripollet y Club Ciclilsta Soses respectivamente. María Cabré, del Club Ciclista Baix Ter, fue el ciclista más joven y Eugeni Pasarrius, de la Associació Ciclista Veterans Provincia Reus, fue el de más edad.
El acto de entrega de premios se llevó a cabo en el exterior del Pabellón Polideportivo Municipal y en él participaron Toni Borbón, presidente del Club Ciclista Mequinenza, y Pedro Mesa, coordinador de la Marcha Cicloturista de Mequinenza, así como Montse Gimeno, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Mequinenza, Luis Esteve, concejal de juventud, festejos y eventos, y los también concejales Pilar Catalán y José María Algueró.