Un atractivo más con el que cuenta la localidad que hay que conservar y difundir para convertirlo en un elemento más de desarrollo orientado al turismo geológico, muy de moda en Europa.
Con una charla y una salida de campo bajo el título “El patrimonio geológico y minero de Mequinenza” a cargo del geólogo de la localidad Darío Vidallet se ponía punto y final a las Jornadas Europeas de Patrimonio a cuya celebración se ha sumado por primera vez Museos de Mequinenza. Las actividades programadas arrancaban el pasado 29 de octubre con otra charla, “Mequinenza, el origen del paisaje” que corrió a cargo de Ánchel Belmonte, geólogo y coordinador científico del Geoparque Sobrarbe-Pirineos.
Medio centenar de personas participaron en la charla en la que Vidallet se refirió a la geomorfología y geodiversidad de la localidad marcada por la erosión con una plataforma estructural muy llana, donde pueden verse estratos sin apenas pliegues, y zonas de barrancos. Habló de la localización del actual núcleo urbano en un antiguo meandro del río Segre y de los hasta cuatro Lugares de Interés Geológico (LIG) catalogados en el municipio que hay que estudiar, conservar y difundir junto con los Puntos de Interés Geológico (PIG), figuras de protección del patrimonio geológico fijados por la reciente legislación aprobada al respecto.
Se refirió al patrimonio minero de Mequinenza, muy abundante por la extracción de sílex o lignito, que no se encuentra en buen estado por lo que sería necesaria una catalogación con el objetivo de ponerlo en valor y difundirlo junto con iniciativas que ya están en marcha como el Museo de la Mina. Apuntaba elementos de las minas Vallfera, Canero, Royo -cuyo castillete se conserva en el Museo-, “Barranc el Pas”, “Lluch-Tres Amigos – donde puede verse unplano inclinado para tirar las vagonetas de carbón- y los espectaculares edificios de la Mina Pilar. Localizaciones, algunas de ellas, protagonistas de la salida de campo que completó la charla.
Atractivos que sumar a la amplia oferta de patrimonio cultural y natural que tiene la localidad y de los que disfrutan los visitantes. Para ello es fundamental la conservación y la difusión de este rico patrimonio geológico y minero que puede llegar a ser un elemento más de desarrollo sostenible del municipio ligado al turismo geológico, muy de moda en Europa.