El acto se ha desarrollado en la Sala Goya y en él han participado los 25 becados en la edición vigesimosexta edición en la que se han repartido 30.000 euros.
Un año más la Sala Goya ha acogido el acto de entrega de las Becas de la Fundació Joaquín Torres universitarios de Mequinensa. Un acto en el que se recuerda la figura de este generoso mequinenzano que hizo fortuna en el mundo editorial en Latinoamérica y que quiso apoyar a los estudiantes de la localidad a través de estas ayudas que en su vigésimo sexta edición eprciben 25 jóvenes. Como ya ocurriera en la edición del 25 aniversario la mayoría de becados son mujeres, siguen sus estudios en las universidades de Lleida, Rovira i Virgili y Zaragoza y han optado por estudios relacionados con la salud. Tres de ellos se han graduado.
En cuanto a la dotación económica de las becas en la edición de este año asciende a 1.200 euros cada una, una cifra ligeramente inferior a la del año pasado, con un importe total de 30.000 euros. Del total, tal y como ocurrió en 2018, algo más de 4.000 euros los ha aportado el Ajuntament de Mequinensa para completar la asignación de cada una de ellas. Desde su creación se han entregado 651 becas por un importe que ronda los 780.000 euros.
Magda Godia, alcaldesa de Mequinenza y Presidenta de la Fundación, ha destacado la generosidad de Joaquín Torres, hijo predilecto de la localidad, y lo que significa para los universitarios de la localidad y sus familias. Se refería a las dificultades para mantener el importe de las becas y el esfuerzo que supone. Dirigiéndose a los becados subrayaba el gesto de Torres, “algo que tenéis que tener muy presente”, y afirmaba estar “orgullosos de vuestro trabajo, que ha llevado a muchos de vosotros a hacer cosas muy importantes”.
Por su parte, los universitarios becados, no han querido perder la ocasión para agradecer la generosidad de Torres y el trabajo que desarrolla la Fundación “que nos ayuda a seguir formándonos y a mirar al futuro” sin olvidar a familiares y amigos “que nos aguantan en época de exámenes”. Animaban a sus compañeros a “luchar por sus sueños y formarse, un esfuerzo que acaba teniendo recompensa”.
Joaquín Torres Arbiol
Joaquín Torres Arbiol es el emigrante ultramarino más notable y generoso del “Poble”. Nació en Mequinenza el 8 de junio de 1901, este filantrópico mequinenzano dejó su villa natal a los 21 años para hacer el servicio militar en Madrid. Allí y como producto de una serie de casualidades acabó entrando a trabajar en la editorial Espasa, la futura y potente Espasa Calpe. Tan relevante debió de ser su desempeño en la empresa que poco después, en 1926, la editorial le envió a Buenos Aires al objeto de crear una filial o delegación en la capital de Argentina. Compatibilizó su trabajo además, como comercial de otras editoriales españolas como Seix Barral y Cervantes. Se dedicó a detectar ediciones clandestinas, fraudulentas, sobre todo las venidas de Chile, así advertía a editoriales y librerías para impedir su adquisición, luchando así contra la piratería. En el año 1931 se convirtió en propietario de la editorial Juventud Argentina.